En el próximo libro “Retazos
de Syldya” también podremos encontrar una extraña fabulación sobre la posible
presencia de la señorita Swanton en el mítico hospital de La Salpétriêre,
Paris. Según los escasos fragmentos que nos han llegado sobre el particular, la
investigadora artificial pudo visitar dicha institución interesándose por el
trabajo fotográfico que el propio Jean Martin Charcot había impulsado sobre sus
pacientes. Las mujeres dementes e incurables que se encontraban allí para su
estudio, fueron inmortalizadas en sucesivas etapas de sus dolencias con la
intención de ser clasificadas de forma analítica.
Syldya tuvo allí la
oportunidad de examinar los negativos originales, pero hay cierta polémica en
torno a si visitó el sanatorio antes o después de la muerte del propio Charcot.
Sabemos que pudieron tener algún tipo de contacto epistolar en el que
discutieron sus puntos de vista sobre la naciente neurociencia, pero es posible
que Syldya caminara por los oscuros pasillos de La Salpétriêre a primeros del
siglo XX, unos diez años después de la muerte del buen doctor. Sin embargo,
parece ser que una atmósfera especial, cargada de energías positivas y negativas,
impregnaba dichos pasillos y, sobre todo, las mugrientas celdas del sótano.